Enfermedades hepáticas: Consejos prácticos
Escribir un libro de medicina no es una tarea fácil. Cuando es realizada por un solo autor, el libro es homogénea y consistente en el estilo. Sin embargo, hoy en día, la acumulación de conocimiento médico es tan grande que no hay expertos en enfermedades de un órgano o sistema. En general, los médicos trabajan estudiar una enfermedad o procedimiento terapéutico. Hay expertos médicos en las complicaciones de la cirrosis, hepatitis viral, enfermedad hepática autoinmune, el trasplante de hígado, etc. Por lo tanto, la mayoría de los libros se hacen hoy por numerosos autores, cada uno de los cuales se ocupa de su área de interés. libros actuales son, por lo tanto, menos homogénea, pero su contenido es mucho más avanzado. Escribir un libro para los pacientes sigue siendo un proyecto mucho más complejo. Los médicos están acostumbrados a utilizar un lenguaje específico, difícil de entender para público no médico. Esto es hasta tal punto que a veces es difícil para un especialista en un área particular para comprender plenamente otros libros de la especialidad. Hay palabras que definen los procesos, las diferentes formas de la progresión de una enfermedad o previsiones específicas. Estamos tan acostumbrados a utilizar que no nos damos cuenta de que contribuyen en gran medida a lo que la población en general define como "lenguaje ininteligible de los médicos." Los autores de este libro han intentado, en mi opinión, por lo general con éxito, descartar esta terminología.En muchos países, las sociedades científicas juegan un papel importante en la regulación de la función de las especialidades médicas. Definir los contenidos de las especialidades, determinar las competencias y habilidades necesarias para ser un especialista, participar en el examen de los futuros especialistas, promover la investigación, la organización de conferencias y reuniones en las que se presentan los avances médicos y la formación se lleva a cabo, tienen revistas donde los resultados de los proyectos de investigación están publicados, influyen en los organismos oficiales que promueven la salud y la investigación, y contribuyen a la educación sanitaria de la población a colaborar con las asociaciones de pacientes. En nuestro país, la intervención del gobierno en la organización social es tan importante que el papel de las sociedades científicas se reduce a organizar conferencias y reuniones para la formación continuada de sus miembros.La Asociación Española para el Estudio del Hígado es una sociedad científica peculiar. No tiene una especialidad específica detrás de la hepatología ya no está actualmente reconocida como una especialidad o subespecialidad médica. Sin embargo, es una sociedad moderna con gran empuje científica, joven y dispuesto a jugar un papel en la política científica y de salud español. Cuenta con aproximadamente 800 socios, entre ellos los gastroenterólogos, internistas y los investigadores básicos. Organiza un congreso anual, reuniones monográficas y cursos de formación para los médicos residentes. Proporciona becas para la formación en investigación en el extranjero. Es el área de la medicina con una mayor productividad científica de nuestro país. Se organiza la hepatología en espera de ser reconocida como subespecialidad proyectos de calidad, que define cómo se va a ser una unidad de Hepatología, el programa mínimo de formación de un hepatólogo, y las unidades de los sistemas de acreditación capaz de formar especialistas. Por último, con este libro, que comienza en el campo de la educación para la salud de la población.
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